'Mirar lo que se tiene delante de los ojos, requiere constante esfuerzo...'.[George Orwell]
No se alcanza la Gloria sin Sufrimiento, ni tampoco se Aprende sin Dolor. Esto es algo que conoce bien el peregrino que, saliendo de Villafranca del Bierzo, encamina sus pasos hacia Piedrafita y, una vez dejada atrás ésta, enfrenta la ardua y dificultosa Scala Dei -comparativamente hablando- que es la ascensión al Alto del Cebreiro.
Hola Juancar! Que últimamente sigo los blogs casi de soslayo con tanto trajín, que bonito el vídeo, nunca he entrado en la iglesia de O'Cebreiro, nunca ha estado abierta cuando hemos volado esa bella tierra la puerta de Galicia ¡Precioso! Un beso.
ResponderEliminarHola, bruja. Es una pena que no pudieras entrar en esa antiquisima iglesia; todo el lugar es un lugar del espíritu, no cabe duda, y es en este punto donde creo yo que se canaliza el telurismo que subyace en sus entrañas. Un telurismo cuyas fuerzas actúan de determinada manera sobre cada uno, proporcionándole experiencias que han de dejar huella en su alma. La puerta a Galicia, como bien dices, a través de una región -Lugo- que todavía lleva el nombre del principal dios celtíbero que la fundó: Lug. Y ánimo, que ya queda poco para esas merecidas vacaciones, donde seguro te recuperarás y olvidarás el trajín de estos días. Un abrazo
ResponderEliminarYa que citas a Lug... diría yo, que la cumbre de este Cebreiro es como el caldero del céltico dios, aquí se cuece una telúrica poción mágica que revitaliza.
ResponderEliminarSalud y fraternidad.
Muy oportuno tu comentario, Magister, porque, como sabes, ya se identificaba este monte con el Monsalvat de la saga griálica de Wolfram, y dentro de los mitos célticos, el caldero de Dagda y la poción de Keridwen le sirven de antecedentes. Es telúrica poción mágica que se cuece en este caldero es real; a mí me afectó y tú fuíste testigo. ¿Qué más puedo decir, salvo que pocos lugares como éste afectan tanto al espíritu?. Un abrazo
ResponderEliminarDurante mi estancia en O'cebreiro, recorriendo el camino de Santiago, tuve una fuerte experiencia en las mismas puertas de la Iglesia (pase la noche en el portal), me preguntaba si alguien conoce alguna leyenda o conoce alguna historia sobre el alma de algun caminante que ronde por alli aún. Muchas gracias
ResponderEliminarHola, Aitor. No podría citarte fuentes, pero en alguna parte leí o me contaron (perdóname, pero ya no estoy seguro) que el fantasma del propio Elías Valiña, el antiguo párroco, se aparecía para ayudar a peregrinos en apuros. Son 'dimes y diretes del Camino'; algo parecido ocurre, según algunos, con el espíritu de una peregrina extranjera que murió en el Camino, a la altura de Fontcebadón o Manjarín (o al menos en ese tramo) y hay quien dice que también se aparece para ayudar a peregrinos en apuros. Incluso hay una muy conocida, de Menéndez Pelayo (recogida por Alfredo Gil del Río: 'El Camino Francés a Compostela. Evocaciones y leyendas siguiendo las estrellas', Editorial Comercial Atheneum, S.A., 1980, página 25) que dice: 'En camino de Santiago / iba un alma peregrina / una noche tan oscura, / que ni una estrella lucía; / por donde el alma pasaba / la tierra se estremecía...'. Siento no poderte servir de más ayuda, pero dado que yo sentí algo muy especial en esta iglesia, me gustaría conocer tu experiencia. Por si no te importa comentármela, mi correo es juancar347@gmail.es
ResponderEliminarSaludos cordiales